
Desde su inicio sabíamos que sería una apuesta complicada. Aún así NBC colocó Outlaw en un espacio de viernes, compitiendo directamente con Tom Selleck y su Blue Bloods, Haven y el mismo día, «viernes social». El resultado: una baja audiencia que lleva a NBC a tomar acciones preventivas. La cadena del arcoiris detiene la producción de Outlaw, quedando con cinco episodios sin emitir. Esto significa que no se rodarán más episodios, pero seguirá al aire con el material que se tiene listo. El retorno al set depende de los números de audiencia.
Sinceramente veo difícil que se recupere, mucho menos permaneciendo en viernes. Este paro de producción marca el inicio de una muerte anunciada, por lo que sí, consideremos que Outlaw se encuentra a un paso de la cancelación.